Pues parece que sí que hay cosas que ver en Guissona (I)

Parece mentira que, a la altura que estamos en cuanto a los avances tecnológicos y de la comunicación, todavía haya destinos de los que apenas podamos encontrar información por la red.  Es muy fácil encontrar miles de posts y artículos de aquellos sitios conocidos como “típicos” turísticamente hablando…pero no podemos (por increíble que le suene a muchos) encontrarlo todo. Y eso es lo que, al menos hasta el día de hoy, pasaba con Guissona.

Foto de Barcelona Travel Bloggers

No pretendo engañar a nadie, yo sabía (hasta ahora) lo mismo que muchos de los que estáis leyendo este post: y es que si habéis oído hablar de Guissona ha sido gracias a que se podían hacer excursiones a la fábrica del Bon Área.

Aún así, estaba convencidísima de que Guissona había sido escogida para el siguiente flashtrip de @BcnTB porque “algo habrá más allá del buffet libre y su visita guiada por la fábrica”, por lo que decidí formar parte de él.

Y así fue. Y es que este pueblo de Lleida tiene mucho que aportar al visitante.

Nos tocó madrugar un poquito debido a la distancia que había desde Barcelona y a que los días son bastante cortos para nuestro gusto. Debo confesar que dormí poco la noche anterior. Ya lo dije en el post anterior, ¡conocer a gente nueva me pone nerviosa! Pero nada, una vez en nuestro coche calentito (cedido por Centauro Rent a Car) pude conocer a todos los que serían mis compañeros de viaje. Poco a poco el silencio se fue transformando en interesantes conversaciones y muchas risas que nos acompañaron hasta el final de la jornada.

Nuestra llegada fue un poco más temprana de lo previsto, así que desde el Celler de Guissona, donde planeábamos pasarnos para la hora de la comida, nos avisaron de que podíamos tomar un café para entrar en calor antes de empezar nuestra visita.

RUINAS ARQUEOLÓGICAS DE IESSO Y MUSEO DE GUISSONA

Durante nuestro pequeño paseo hacia nuestra primera parada, el Museo de Guissona, nos dimos cuenta de un detalle. Y es que apenas había alguien paseando por sus calles. Enseguida se mencionó que es un lugar con muy poco paro, un 2%, y que lo más probable es que estuvieran trabajando. Aunque mi mente me dijo que también podía ser por el frío que hacía y a lo calentitos que debían estar en sus casas. ¡Menos mal que me había abrigado como si fuera a la nieve!

Vestigios de Iesso, ciudad romana

La llegada fue un poquito accidentada (hubo quien acabó colándose en un taller de cuidado de bonsais~) porque la entrada al Museo o no estaba muy bien señalizada o estábamos más dormidos de lo que pensábamos.
Josep Ros, director del museo, fue nuestro primer guía. Nos explicó muchas cosas sobre la antigua gran ciudad de Iesso en base a los restos que han ido encontrando y que ahora cuidan con mucho esmero. Siempre me ha encantado esa inquietud que tienen aquellos que se dedican a la arqueología y la historia y me apasiona escuchar cada una de las cosas que me tienen que decir sobre "esas piedras". Eso sí, en Guissona las ruinas arqueológicas tienen un aspecto increíble. Se puede distinguir claramente el lugar que ocupaba la muralla, su entrada, la Domus e incluso unas termas públicas. Os recomiendo que si vais os apuntéis por lo menos a una de las rutas guiadas que ofrecen AQUI.

Interior del Museo

"Museologísticamente" hablando, me pareció un lugar adecuado. Letras grandes, un claro orden ("museos IKEA" los llamo yo jaja), todo a una altura correcta y la iluminación justa para ver bien. A destacar queda que si vais de visita podréis ver el esqueleto humano de una chica encontrada durante las excavaciones en extrañas circunstancias, el "Caballo de bronce", símbolo de Guissona y una lápida funeraria del siglo II d.C. en el que una madre despide a su hija de doce años.

RUTA POR EL CASCO ANTIGUO

Lo siguiente fue, como no, dar una vuelta por el casco antiguo de Guissona junto a nuestra segunda guía: Gemma de Solà Gómez (la cual nos debe una invitación a todos para volver en julio, ¡a las fiestas!)

Nuestro recorrido fue:

• Fuentes (s.XVII) y lavaderos (s.XVIII), lugar de encuentros.
  

• Portal de l'Àngel (s.XII), única de las tres entradas que tenía la muralla medieval que se conserva actualmente.

• Plaza Mayor, con sus característicos porches del s. XVII.

Probando las panorámicas de mi móvil~  Lo que el juego claro/oscuro no ayuda :(

Buscad "stalker" y saldré de ejemplo (?)

• Iglesia Mayor (s.XVII). No es nada del otro mundo, pero tiene detalles que la hacen visitable.

• Plaza Capdevila, en la foto da miedo, lo sé, pero es una plaza tranquilita. ¿Alguien me sabe decir qué es eso blanco? ¡Animaos!

La intención era hacer un recorrido más extenso, pero nos faltaba tiempo para todo. Pero vamos, que lo único que tengo que hacer es volver :P 

Como no quiero extenderme demasiado con el post, he decidido dividirlo en dos partes. En unos días publicaré lo que hicimos por la tarde: cata de cervezas de La Segarra, comilona en el Celler de Guissona y visita al Castillo de Les Sitges. 

Espero estar despertando vuestras ganas de visitar Guissona ;)

¡MUCHAS GRACIAS!